10 consejos prácticos para que vayas un paso adelante del reclutado.
Infórmate sobre la empresa que te va a entrevistar y del sector al que pertenece
Sé puntual. Si es posible, llega 15 minutos antes, para que estés relajado. Mantén una postura adecuada, cuida tu tono de voz y sé natural.
Escucha bien cada pregunta. Recuerda que nadie calificará qué tan rápido eres para contestar; puedes tomarte unos segundos para pensar cuál será tu respuesta y estructurarla bien.
No hables mucho ni hables por hablar. Permite a tu interlocutor hablar; no lo interrumpas. En decir, evita tomar el control de la entrevista.
Ten bien claros tus logros; es el momento para exponerlos. Prepáralos y escríbelos antes de tu entrevista. Usa ejemplos concretos de tu experiencia profesional.
Prepara tus respuestas. Colócate en el lugar del entrevistador: haz una lista de preguntas que tú harías a un candidato para una vacante y piensa cuál sería la mejor respuesta para cada una. Pueden hacerte varios tipos de preguntas, desde las más comunes orientadas hacia tus trabajos anteriores y nivel de responsabilidad en los mismos, pasando por las dirigidas a tus competencias profesionales para la resolución de objetivos o conflictos, y hasta las relacionadas a tu personalidad y plan de vida.
Sé siempre positivo. No hables mal de las empresas en las que has trabajado anteriormente, ni de tus jefes. Enfócate en los retos que enfrentaste, cómo resolviste los problemas y lo que aprendiste en ellas.
Piensa en que la entrevista es el medio para que un empleado y un empleador puedan llegar a intercambiar valor. Llega a la entrevista pensando en que puedes lograrlo, que te mereces esa oportunidad, y contesta seguro de ti mismo.
Sé sincero. Uno de los principales errores en la entrevista es hablar sobre éxitos laborales que no son tuyos. Si fuiste un miembro del equipo, pero no el responsable, explica cuál fue tu contribución. Si te despidieron de un trabajo o has cambiado mucho de trabajo últimamente, explica la situación clara, pero brevemente.
El entrevistador también quiere conocer quién eres fuera del trabajo. Cuando te hagan preguntas personales, deja que el entrevistador conozca los mejores aspectos de tu personalidad, pero mantenlo breve. Enfatiza características que las empresas siempre buscan: entusiasmo, energía, responsabilidad, honestidad, compromiso.